jueves, 16 de junio de 2016

Las razones de la esposa de Robbie Williams para no tener sexo con él



"Lo único que me apetece hacer es ponerme un pantalón, comer chocolate e irme después a dormir, y acurrucarme debajo de las sábanas en posición fetal".
Robbie Williams se ha encargado con cada puesta en escena de convertirse en un mito erótico para miles de mujeres. Pero tal cual, versa la sabiduría popular, no todo lo que brilla es oro y Ayda Field, su esposa, quien creeríamos lo disfruta cada noche, prefiere dormir. 
¿Cómo? Sí, así lo señala ella misma y en declaraciones públicas. 
Lo último que se le pasa por la cabeza Ayda, madre de Teddy y Charlton, cuando se mete en la cama, es abalanzarse sobre su marido, como ella misma reconoce, está demasiado "agotada" para pensar en cualquier otra cosa que no sea dormir.
"Este es un tipo de conversación que incomoda a muchas mujeres, pero en realidad es algo que experimentamos muchas de nosotras. Yo tengo dos niños pequeños, estoy siempre agotada. 

Posición fetal 

Estoy muy, muy cansada, y lo único que me apetece hacer es ponerme un pantalón, comer chocolate e irme después a dormir, y acurrucarme debajo de las sábanas en posición fetal", confesó Ayda sobre su vida sexual en el programa 'Loose Women' después de que la colaboradora Saira Khan revelara que su propio marido y ella apenas mantenían relaciones.
La maternidad no ha afectado únicamente a la relación de pareja de Ayda y Robbie, también ha modificado su rutina de belleza debido a la falta de tiempo, que le ha obligado incluso a renunciar a depilarse las piernas.
"Creo que no me he depilado las piernas desde que me casé. Pero es que estoy exhausta, ¡no tengo tiempo!", reconoció.
Sin embargo, el intérprete se ha mostrado comprensivo en todo momento con la situación de su mujer, conformándose con cualquier muestra de afecto que le de Ayda por mínima que sea.
"Pobre Rob. La verdad es que estoy pintando un panorama desolador: dormir en posición fetal, no depilarme las piernas... Pero creo que él se emociona sólo con poder acariciarme la pierna. Es un encanto en ese sentido", reconoció Ayda.
Con información de Caracol